El tiempo nos ha enseñado que sí podemos elevar tanto la calidad como la velocidad de lo que hacemos, sin necesariamente tener que sacrificar una por la otra, es simplemente procurar “un impulso por hacer las cosas bien, en el acto”. Somos un equipo que les gusta ser decisivo y que apuesta a actuar y cerrar asuntos; nos gusta la agilidad y siempre tratamos de acortar los tiempos de los ciclos en los procesos. Además, de delegar, colaborar y hacer redes para acelerar el logro de resultados. El tiempo es un factor determinante en la vida de los niños con medidas de protección.
La justicia nos define como una de nuestras virtudes cardinales, nos motiva a dar a cada niño o niña lo que le corresponde o le pertenece. Es el derecho, la razón, la equidad. Es la ética y la honradez la que nos define como Fundación. Es aquello que debe hacerse según el derecho y la razón, es el sentimiento de rectitud que gobierna la conducta y hace acatar los derechos de los demás. La justicia es un hábito del corazón que se adquiere en la familia de una manera natural, y que debemos desarrollar particularmente en los menos favorecidos.